La intradermoterapia facial es un eslabón intermedio entre el tratamiento tópico y las infiltraciones con materiales de relleno. Una manera de incrementar la eficacia de los principios activos presentes en un cosmético, ya que se los puede introducir con una aguja.
La intredermoterapia facial es una buena manera de incrementar la eficacia de los principios activos presentes en un cosmético, ya que se los puede introducir con una aguja dentro de la piel.
Existe bastante evidencia científica de que sustancias como la vitamina A, la C o el ácido hialurónico aplicados tópicamente son eficaces en la lucha contra el envejecimiento de la piel.
Se podría decir, entonces, que la intredermoterapia facial es un eslabón intermedio entre el tratamiento tópico y las infiltraciones con materiales de relleno.
Estos tratamientos pueden producir excelentes resultados, efectivos y apreciables muy rápidamente.
Los mejores resultados se obtienen al cabo de 8 a 10 semanas de tratamiento, aunque algunos pacientes pueden requerir algún tiempo más.