La cosmética lleva tiempo apoyándose en la ciencia para crear potentes formulaciones antienvejecimiento. Basada en los avances en genómica y proteómica, nació la cosmética inteligente. Ahora, la metabolómica toma el relevo. La cosmética lleva tiempo apoyándose en la ciencia para crear potentes formulaciones que ayuden a la piel a evitar y contrarrestar los signos del envejecimiento.
Ahora, la metabolómica toma el relevo.
Una ciencia que estudia el conjunto de pequeñas moléculas o metabolitos, que hay en un sistema biológico.
Estos metabolitos intervienen en los procesos celulares y revelan cómo está funcionando el metabolismo en un órgano determinado o en un ser vivo.
¿Y cómo puede esto ayudar a la piel?
De momento, esta ciencia ha inspirado a la firma de cosmética Lancôme para crear su nueva línea de tratamientos, Énergie de vie.
Indicada para mujeres urbanas y jovenes de 25 a 35 años que acusan en su piel los efectos del cansancio urbano, uno de los males de este siglo.
¿Belleza y estrés? La Generación Y
Las mujeres de esta nueva generación viven al límite del agotamiento. Pero por nada del mundo querrían dejar de disfrutar de este ritmo de vida trepidante.
Acuden a todos los eventos sociales, llevan múltiples proyectos personales y profesionales, siguen las redes sociales y las tendencias.
La Generación Y, también conocida como Generación del Milenio, milenial o Milénica, es la cohorte demográfica que sigue a la Generación X.
Todo esto, claro, desean hacerlo con una buena imagen. ¿Contradictorio? Puede ser.
Sin embargo, es difícil. Cuando la piel acusa el cansancio, aparecen ojeras, deshidratación, rojeces…
A los 30 años estas marcas se van transformando poco a poco en signos de envejecimiento: tez apagada, arrugas y flacidez.
Pero tiene solución, aún se pueden reparar. Y aquí ayuda la ciencia.
Todos estos factores, desde el ejercicio a la alimentación y el estrés, intervienen en el análisis metabolómico.
“Esta ciencia ofrece una especie de instantánea del metabolismo”, explica el Dr. John Ryals, CEO del centro de investigación Metabolon y especialista en este tema.
“En medicina, esta ciencia permite realizar un diagnóstico más predictivo y una cirugía ultraprecisa. Por ejemplo, al operar a un paciente, se puede analizar en tiempo real la calidad de los tejidos”, aclara el experto.
Para determinar como se ve afectada la piel por el agotamiento al que se ven sometidas las mujeres de la llamada Generación Y, la empresa Lancôme, junto con el Centro Metabolon, han realizado un estudio pionero para recabar, analizar e interpretar cientos de metabolitos.
¿Su objetivo? Descubrir las posibles variaciones del metaboloma provocadas por el cansancio urbano
El estudio enseña que, debido al cansancio generado por la vida urbana, diversas familias de componentes de la piel se ven afectadas por numerosas oxidaciones celulares.
Por ejemplo, los aminoácidos han resultado ser muy sensibles al cansancio urbano.
Es el caso de la metionina que se ve perjudicada, y cuyo papel es vital para proteger las mitocondrias, las plantas generadoras de energía en el corazón de la célula.
Con este estudio, la casa francesa demuestra que el cansancio urbano altera la capacidad de autodefensa de la piel y contribuye a un envejecimiento precoz.