La limpieza iónica juega un papel muy importante en la correcta eliminación de las toxinas del cuerpo, ya que el efecto del campo electromagnético generado en el agua sobre los puntos reflejos genera un estímulo que se propaga a los diferentes órganos. La desintoxicación iónica es una terapia de limpieza de las toxinas de nuestro cuerpo, una rutina que se debería realizar periódicamente para mantener la salud.
El cuerpo humano se contamina de fuentes externas (exógenas) como internas (endógenas).
Los medios más comunes de la exposición de toxinas externas son: la inhalación de aire contaminado, humo de cigarrillos (fumador pasivo), productos químicos, agua, medicamentos, plaguicidas, teléfonos celulares, monitores de computadoras, hornos de microondas, redes eléctricas, antenas, etc.
Las fuentes internas de toxinas son: fermentación de los alimentos ingeridos, deshidratación, mala alimentación, stress y desequilibrio emocional.
Como se puede ver, incluso personas que concientemente logran estilos de vida saludables, están sujetas a muchas fuentes de intoxicación en su vida.
Electrones y toxinas
La vida y la salud del ser humano son determinadas por la cantidad de electrones que se llevan dentro el cuerpo.
Una persona sana debe tener un 80% de electrones negativos (aniones) y 20% de electrones positivos (cationes).
Debido a la contaminación del aire, agua y alimentos, además de otros factores provocados por el “estilo de vida” actual, acumulamos electrones positivos en nuestro cuerpo. La acumulación excesiva de cationes se convertirá en toxinas.
La terapia trabaja a nivel electrolítico, llevando a cabo un proceso llamado ionización, mediante el cual se rompen las moléculas del agua que se encuentra en el recipiente en donde están los pies, separándolas en miles de iones negativos.
Por ósmosis, una gran cantidad de aniones (iones negativos) penetran las diferentes membranas del cuerpo y, al encontrarse con iones positivos, es decir con toxinas adheridas a los diferentes tejidos corporales (piel, órganos, etc.), la carga negativa de los aniones neutraliza la carga positiva de las toxinas o cationes.
La terapia
La terapia promueve la actividad de los iones en el organismo.
Consiste en introducir los pies en un recipiente que contiene agua y sal; un equipo especial ioniza el agua y ésta estimula la desintoxicación del cuerpo en menos de media hora.
El agua se va tornando oscura por las toxinas que se van eliminando.
Esta terapia, junto con un estilo de vida sano y de bajo stress, proporciona una manera completa y eficiente de mantener niveles de alta energía y salud a largo plazo.
Generalmente, si las toxinas se quedan en el cuerpo darán lugar a una enfermedad crónica.
Practicar la terapia durante un periodo de tiempo largo ayuda a tener bajo control la salud y a mejorar la calidad de vida.
Baño electrolítico
Por medio de un baño electrolítico se controla el flujo de iones del agua que lo transmite al cuerpo, dicho flujo de iones es la condición necesaria para transportar electrones al cuerpo y, por consiguiente, para que se produzca gran parte de la comunicación celular y la neutralización de radicales libres, metales pesados y sustancias tóxicas que actúan como radicales.
Al ser neutralizada la carga positiva de las toxinas, éstas se desprenden de los tejidos a los cuáles estaban adheridas y son extraídas del cuerpo por ósmosis y difusión facilitada a través de los pies.
El cuerpo, al reconocer el proceso de desintoxicación que se está llevando a cabo, coopera incrementando el metabolismo, acelerando la actividad celular, segregando varias clases de enzimas, y apresurando la función de eliminación de los diferentes órganos excretorios, particularmente del hígado, riñones, piel, las plantas de los pies y la respiración.
Con esta terapia se minimizan los posibles efectos secundarios no deseados provocados con los métodos de desintoxicación biológicos tradicionales, en los que a menudo es difícil evitar un sobreesfuerzo del hígado.
Además de lograr eliminar una gran cantidad de toxinas, la terapia dará al cuerpo una gran cantidad de iones negativos que son los que además nos hacen sentir en paz, relajados, sanos, alertas, por lo que nuestro cuerpo se sentirá más ligero después del tratamiento, nuestra mente pensará más claramente y sentiremos un mayor sentido del bienestar.
Durante el proceso electrolítico, el agua en contacto con los pies suele adoptar una coloración intensa que va en función de las sustancias excretadas.
Una parte de dicha coloración se debe a los compuestos que contiene el agua. Sin embargo, habrá partículas más tóxicas en el agua que han sido drenadas del cuerpo, las que formarán anillos pegajosos, espuma, aglomeraciones de sustancias y otras formas de partículas y colores.
Por qué se aplica en los pies
La respuesta está en el hecho de que la planta de los pies es la región del cuerpo humano que posee mas poros y contiene, además, los puntos reflexológicos conectados directamente a los meridianos, órganos, aparatos y sistemas.
La limpieza iónica, un estímulo bioenergético
La limpieza iónica juega un papel muy importante en la correcta eliminación de las toxinas del cuerpo, ya que el efecto del campo electromagnético generado en el agua sobre los puntos reflejos que existen en la planta de los pies o en la palma de las manos, genera un estímulo que se propaga a los diferentes órganos.
Los resultados, entre otros, son el desbloqueo energético y el restablecimiento del equilibrio corporal, así como una pronunciada sensación de bienestar.
De esta forma, la limpieza iónica estimula bioenergéticamente el cuerpo para facilitar su auto desintoxicación, potenciar el correcto funcionamiento de los órganos y reequilibrar los campos energéticos.
Así mismo, todos los sistemas del cuerpo funcionarán mejor y podrá tener una mejor calidad de vida.
Al fortalecer la eliminación de grasas y todo tipo de toxinas en el organismo, incluyendo el tabaco, el alcohol y las drogas, logramos una mejor absorción de nutrientes, estimulando la regeneración celular, mejorando la respiración y aumentando la energía corporal.
Algunos beneficios
– Acelera el metabolismo y la digestión.
– Libera stress y mejora la calidad del sueño.
– Relaja articulaciones, músculos y huesos.
– Expulsa todas las grasas y demás toxinas del cuerpo y del torrente sanguíneo.
– Depura órganos como: riñón, próstata, hígado, sistema reproductor, vesícula, pulmones.
– Fortalece los sistemas respiratorio e inmunológico.
– Combate todo tipo de alergias y problemas de la piel.
– Facilita la circulación sanguínea.
– Retarda el envejecimiento.
– Estimula la regeneración celular.
– Regula desórdenes hormonales.
– Reduce el dolor y la inflamación.
– Alivia la fatiga crónica y facilita el descanso.
– Purifica la sangre y drena el sistema linfático.
– Maximiza la desintoxicación natural del cuerpo.
– Estimula la absorción de nutrientes.
– Ayuda a resolver problemas y manchas de la piel.
– Aumenta la energía y el sentido de bienestar corporal.
Contraindicaciones
Quienes no pueden realizarse la limpieza iónica:
– Las personas que llevan marcapasos y otros dispositivos magnéticos.
– Aquellos que no tienen alguna reacción con la prueba del músculo y la reacción es débil cuando sumergen los pies en el agua.
– Personas que han sido sometidas a operaciones de trasplantes de corazón.
– Las mujeres embarazadas y en período de lactancia.
– Pacientes con hemofilia.
– Personas con epilepsia.
Cabe resaltar que no hay ningún tipo de contraindicación con personas que están siguiendo algún tratamiento farmacológico, ya que la limpieza iónica estimula sólo la función natural corporal que permite la liberación de toxinas y otras impurezas.
Por supuesto, es recomendable consultar a su médico antes de utilizar este método de desintoxicación.