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Pasos básicos para una sesión de sauna seco

Para tomar una sesión de sauna hay que seguir un determinado protocolo que garantizará la efectividad del mismo. Sin embargo, siempre es el propio usuario quien deberá ir adaptando las indicaciones generales a su propio gusto, teniendo en cuenta su estado de ánimo, su estado físico y su propia experiencia. Para tomar una sesión de sauna hay que seguir un determinado protocolo que garantizará la efectividad del mismo. Sin embargo, siempre es el propio usuario quien deberá ir adaptando las indicaciones generales a su propio gusto, teniendo en cuenta su estado de ánimo, su estado físico y su propia experiencia.

Básicamente, lo más importante es tomar la sesión de sauna con tranquilidad y sin agobios. El tiempo preciso de una sesión normal oscila, aproximadamente, entre 30′ y 60′. De ese tiempo, raramente se hará más de 40′ dentro de la cabina.

Los pasos generales a seguir son los siguientes:

1) Ducharse con agua caliente y jabón. Hay dos formas diferentes de entrar en el sauna: una, con la piel mojada, y otra, con la piel seca. Ambas son validas y constituyen dos escuelas diferentes. Los que defienden esta última postura sostienen que, como la piel mojada retiene el sudor, es contraproducente ya que puede causar irritarción y provocar algún episodio eczémico.

2) Sentarse o recostarse sobre una toalla para evitar quemarse con los bancos. Y también por motivos higiénicos.

3) Al entrar a la cabina del sauna, ubicarse en un banco intermedio o superior y permanecer un máximo de 15 minutos. El situarse en un banco inferior sobrecarga el corazón, aunque también se puede realizar una aclimatación progresiva ubicándose primero en los inferiores para ir ascendiendo después.

4) El tiempo óptimo de permanencia está entre los 10 y los 15 minutos, pudiendo llegar hasta los 25′. Pero es recomensable que sea el propio usuario quien determine su tiempo de estancia.

5) Se debe abandonar el sauna cuando se note una sensación de agobio, producida habitualmente como consecuencia de la sudoración continuada. Este es el punto donde se obtienen los efectos beneficiosos. En caso de no alcanzar esta instancia, los efectos no se producen, y si se sobrepasa, disminuyen.

6) La temperatura debe estar entre los 80 y 90 °C (máximo 100 °C). Se comienza a sudar a los 8 o 12 minutos. Para ello es necesario un aumento de la temperatura corporal de algunos grados. En realidad, es prácticamente lo mismo tomarlo a 80 ó 100 °C. Un sauna excesivamente caluroso y seco es contraproducente para una óptima sudoración.

7) Para que todo el cuerpo esté a la misma temperatura se debe permanecer recostado. El gradiente de temperatura es muy alto, por lo que la diferencia entre los bancos inferiores y superiores suele ser notable.

8) Para subir la humedad se aumenta la sensación de calor, pudiéndose verter agua sobre las piedras, opcionalmente con alguna esencia. Hay que tener en cuenta que el aumento de humedad reduce la transpiración, lo que es contraproducente. Una elevación brusca e instantánea de la humedad, el llamado golpe de vapor, es beneficioso.

9) Hay que evitar los golpes de calor en los primeros minutos de la estancia en el sauna. Se debe respirar por la boca y mantenerse relajados.

SAUNA

10) Antes de salir es aconsejable permanecer unos 2 minutos sentado. Y levantarse suavemente.

11) Salir y ducharse con agua fría, comenzando por los pies e ir ascendiendo hacia el centro del cuerpo. La ducha debe refrigerar el cuerpo y el contraste de temperaturas hace que aumente la circulación sanguínea por la superficie corporal. También se puede tomar un baño de inmersión o realizar la refrigeración mediante aire, muy aconsejable para las personas de edad avanzada. Pasar de una sauna caliente a un ambiente frío no es recomendable, aunque es positivo realizar baños de inmersión en aguas frías.

12) Descansar relajado durante 10 ó 15 minutos. Se puede pasear, tomar un masaje, broncearse. Opcionalmente se puede tomar un baño de pies con agua caliente. De ser posible, permanecer al aire libre.

13) Repetir la segunda sesión por un tiempo similar.

14) Nuevo enfriamiento y relajación por un tiempo similar.

15) Eventualmente realizar una tercera sesión de sauna sin abusar.

16) Después del último enfriamiento, para vestirse hay que esperar hasta dejar de transpirar. Luego, se debe descansar y beber algo fresco, sin apuros. No se debe beber alcohol ni antes ni durante la sesión de sauna. Tampoco comer pesadamente.