Una compañía británica de terapia celular focalizada en medicina estética y reparación de tejidos anunció el desarrollo de una piel artificial que podría curar heridas. Se trata de un tejido a base de colágeno, que puede ser un avance fundamental en el tratamiento de quemaduras o daños profundos en la piel. Una compañía británica de terapia celular focalizada en medicina estética y reparación de tejidos anunció el desarrollo de una piel artificial que podría curar heridas. Se trata de un tejido a base de colágeno, que puede ser un avance fundamental en el tratamiento de quemaduras o daños profundos en la piel. Por primera vez una piel hecha en un laboratorio ha sido integrada al cuerpo humano sin problemas, a diferencia de otras alternativas que se biodegradan in situ, luego de unas semanas. Este es un importante paso para la medicina regenerativa.
Las investigaciones, que fueron publicadas por la revista especializada “Regenerative Medicine”, señalan que la prueba se realizó en seis voluntarios a los que se les extirpó un fragmento de piel del brazo y se lo reemplazó por una muestra del tejido artificial. Luego de 28 días de realizado el injerto (un tiempo breve para estos desarrollos), se verificó que la nueva piel se había revascularizado y cubierto por las células del paciente. Pero como las heridas fueron pequeñas y creadas artificialmente, son relativamente sencillas de curar. La verdadera prueba sucederá cuando el tejido se aplique a una herida más grande y ocasionada en el mundo “real”.
La piel sintética consta de una matriz de colágeno producida por las mismas células de piel humana, los fibroblastos, que son responsables de liberar el colágeno en la piel natural. Los fibroblastos entretejen una estructura de colágeno que imita la que se encuentra en la piel, y que comparte muchos de sus atributos estructurales. Los científicos de la compañía británica creen que la combinación de fibroblastos humanos vivos en una matriz de fibroblastos humanos producidos artificialmente, apuntala la integración y aceptación de la piel nueva.
Los científicos que realizaron la investigación, Melody Boyd, Marzena Flasza, Penny Johnson, John St Clair Roberts y Paul Kemp, afirmaron que este tejido artificial se incorporó al tejido real mucho mejor que los desarrollados anteriormente . Los investigadores explicaron que el colágeno hace que la matriz sea más estable y que, por tal motivo, pueda soportar los cambios que ocurren durante el proceso de curación. El próximo paso es hacer las pruebas cruciales con heridas más grandes para verificar los resultados obtenidos, y luego conseguir la licencia para su marketing.