El ácido ursólico es un compuesto triterpénico pentacíclico. Junto a sus derivados, está presente en numerosas especies vegetales, fundamentalmente de la familia de las labiadas: albahaca, orégano, salvia, tomillo, lavanda, menta, etc. Y generalmente junto a su isómero, el ácido oleanólico.
El ácido ursólico es un compuesto triterpénico pentacíclico. Junto a sus derivados, está presente en numerosas especies vegetales, fundamentalmente de la familia de las labiadas: albahaca, orégano, salvia, tomillo, lavanda, menta, etc. Y generalmente junto a su isómero, el ácido oleanólico.
También se lo ha aislado a partir de la cera protectora de diferentes frutas, como peras, manzanas, ciruelas y arándanos, así como también de algas marinas.
En cosmética se emplea el principio activo obtenido por síntesis química.
Acciones y beneficios
– Inhibición del avance de tumores en la piel. Se ha comprobado que el ácido ursólico y el ácido oleanólico, aislados de Glechoma hederacea, inhiben el crecimiento del tumor inducido por TPA (12-O-tetradecanoylphorbol 13-acetate) sobre la piel de ratón. En países como Japón ambos compuestos son recomendados para la prevención y el tratamiento del cáncer de piel. También está en estudio su actividad sobre otros tipos de tumores.
– Antiinflamatoria. Acción habitual en los compuestos triterpénicos, el ácido ursólico inhibe las vías de la ciclooxigenasa, la 5-lipoxigenasa y la elastasa de los leucocitos. Por este motivo, se lo incluye en formulaciones de cosméticos postsolares, descongestivos, calmantes, etc.
– Estimulación del crecimiento de cabello. Estimula la circulación sanguínea en el cuero cabelludo y la activación de los queratinocitos.
– Antimicrobiana. El ácido betaursólico inhibe el crecimiento de algunas variedades de Staphilococcus. Así, numerosas plantas de la familia de las labiadas que contienen ácido ursólico poseen propiedades antibacterianas y antifúngicas. Por ejemplo, la concentración inhibitoria mínima (CIM) de Rosmarinus officinalis, Lavandula officinalis y Origanum majorana. El ácido ursólico también inhibe el crecimiento de Microsporum lenosum y Candida albicans.
– Antienvejecimiento. El ácido ursólico y sus derivados mejoran y refuerzan el colágeno cutáneo, consiguiendo una mayor elasticidad de la piel y la mejora en el aspecto de arrugas y manchas. Se los suele incluir en formulaciones cosméticas para el fotoenvejecimiento, a una concentración que oscila entre 0,05 y 0,20%.
-Crecimiento muscular. Según un estudio publicado en la revista Cell Metabolism, el ácido ursólico reduce el desgaste muscular y promueve el crecimiento de los músculos. También reduce la grasa, los niveles de azúcar, el colesterol y los triglicéridos, pudiendo resultar de gran utilidad en el tratamiento del desgaste muscular y en trastornos metabólicos como la diabetes.